29.1.13

ADN y EMOCIONES

A continuación verás tres asombrosos experimentos con el ADN que prueban las cualidades de autosanación del mismo en consonancia con los sentimientos de la persona, como fue reportado recientemente por Gregg Braden en su programa titulado “Sanando Corazones, sanando Naciones: La Ciencia de La paz y el Poder de La Plegaria”. Gregg Braden empezó como Científico e Ingeniero antes de que se formulara las grandes preguntas.

* EXPERIMENTO 1
El primer experimento fue realizado por el Dr. Vladimir Poponin un Biólogo Cuántico. En este experimento se comenzó por vaciar un recipiente (es decir se creó un vacío en su interior) y luego lo único que se dejó adentro fueron fotones (partículas de luz). Se midió la distribución de estos fotones y se encontró que estaban distribuidas aleatoriamente dentro del recipiente. Este era el resultado esperado.
Entonces se colocó dentro del recipiente una muestra de ADN y la localización de los fotones se midió de nuevo. En esta ocasión los fotones se ORGANIZARON EN LÍNEA junto al ADN. En otras palabras el ADN físico produjo un efecto cuantificable en los fotones.
Después de esto la muestra de ADN fue removida del recipiente y la distribución de los fotones fue nuevamente medida. Los fotones PERMANECIERON ORDENADOS y alineados en donde había estado el ADN.
¿A qué están conectadas las partículas de luz?

* EXPERIMENTO 2
Este experimento fue llevado a cabo por el Ejército de Estados Unidos. Se recogió una muestra de leucocitos (células sanguíneas blancas) de cierto número de donantes. Estas muestras se colocaron en una habitación equipada con un equipo de medición de los cambios eléctricos. En este experimento el donante era colocado en una habitación y sometido a estímulos emocionales consistentes en vídeo clips que generaban emociones en el donante. El ADN era colocado en un lugar diferente al del donante, pero en el mismo edificio. Tanto el donante y como su ADN eran monitoreados y cuando el donante mostraba sus altos y bajos emocionales (medidos en ondas eléctricas) el ADN expresó RESPUESTAS IDÉNTICAS Y AL MISMO TIEMPO. No hubo lapso y tiempo retraso de transmisión. Los altos y bajos del ADN COINCIDIERON EXACTAMENTE EN EL TIEMPO con los altos y bajos del donante.
Los militares querían saber cuan lejos podían separar al donante de su ADN y continuar observando ese efecto. Ellos dejaron de hacer pruebas al llegar a una separación de 80 Kilómetros entre el ADN y su donante y continuaron obteniendo el MISMO resultado sin lapso y sin retraso de transmisión.
El ADN y el donante tuvieron las mismas respuestas al mismo tiempo.
¿Qué significa esto? Gregg Braden dice que esto significa que las células vivas se reconocen por una forma de energía no reconocida con anterioridad. Esta energía no se ve afectada ni por la distancia ni por el tiempo. Esta no es una forma de energía localizada, es una energía que existe en todas partes y todo el tiempo.

* EXPERIMENTO 3
El tercer experimento fue realizado por el Instituto Heart Math y el documento que lo confirma se denomina: “Efectos locales y no locales de frecuencias coherentes del corazón y cambios en la conformación del ADN” (Que no los asuste el titulo, la información es increíble)
Este experimento se relaciona directamente con el ántrax. En este experimento se tomo el ADN de placenta humana (la forma más prístina de ADN) y fue colocado en un recipiente donde se podía medir los cambios del mismo. Se distribuyeron 28 muestras en tubos de ensayo al mismo número de investigadores previamente entrenados. Cada investigador había sido entrenado a generar y SENTIR sentimientos, y cada uno de ellos podían tener fuertes emociones.

Lo que se descubrió fue que el ADN CAMBIO DE FORMA de acuerdo a los sentimientos de los investigadores:
1. Cuando los investigadores sintieron gratitud, amor y aprecio, al ADN respondió RELAJÁNDOSE y sus filamentos estirándose. El ADN se hizo más largo.
2. Cuando los investigadores SINTIERON rabia, miedo o estrés, el ADN respondió APRETÁNDOSE. Se hizo más corto y APAGÓ muchos de los códigos.

¿Alguna vez se han sentido descargados por emociones negativas? Ahora saben por qué sus cuerpos también se descargan. Los códigos del ADN se conectaron de nuevo cuando los investigadores tuvieron sentimientos de amor, alegría, gratitud y aprecio.

Este experimento fue posteriormente aplicado a pacientes con VIH positivos. Ellos descubrieron que los sentimientos de amor, gratitud y aprecio crearon 300.000 veces mayor RESPUESTA INMUNE que la que tuvieron sin ellos. Así que aquí tenemos una respuesta que nos puede ayudar a permanecer con salud, sin importar cuan dañino sea el virus o la bacteria que este flotando alrededor: mantener los sentimientos de alegría, amor, gratitud y aprecio.


Estos cambios emocionales fueron más allá de ser efectos electromagnéticos. Los individuos entrenados para sentir amor profundo fueron capaces de cambiar la forma de su ADN. Gregg Braden dice que esto ilustra una nueva forma de energía que conecta toda la creación. Esta energía parece ser una RED TEJIDA ESTRECHAMENTE que conecta toda la materia. Esencialmente podemos influenciar esa red de creación por medio de nuestra VIBRACIÓN.

* RESUMEN
¿Qué tiene que ver los resultados de estos experimentos con nuestra situación presente? Esta es la ciencia que nos permite escoger una línea de tiempo que nos permite estar a salvo, no importa lo que pase. Como Gregg explica en su libro “El Efecto Isaías”, básicamente el tiempo no es solo lineal (pasado, presente y futuro) sino que también tiene profundidad. La profundidad del tiempo consiste en todas las líneas de tiempo y de oración que puedan ser pronunciadas o que existan. Esencialmente, sus oraciones ya han sido respondidas. Simplemente activamos la que estamos viviendo por medio de nuestros SENTIMIENTOS.

Así es como creamos nuestra realidad, al escogerla con nuestros sentimientos. Nuestros sentimientos están activando la línea de tiempo por medio de la red de creación, que conecta la energía y materia del universo.

Recuerda que la Ley de la Atracción del Universo es que atraemos aquello en lo que nos enfocamos. Si te enfocas en temer cualquier cosa, estarás enviando un fuerte mensaje al Universo para que te envíe aquello a lo que le temes. En cambio si te puedes mantener con sentimientos de alegría, amor, aprecio o gratitud y enfocarte en traer mas de eso a tu vida automáticamente vas a evadir lo negativo: estarías escogiendo una LINEA DE TIEMPO diferente con estos sentimientos.

Esto puede evitar el contagiarse de ántrax o cualquier otra gripe o virus, permaneciendo en estos sentimientos positivos que mantiene un sistema inmune extraordinariamente fuerte.

Así que esta es una protección para lo que venga: busca algo por lo cual estar alegre todos los días, cada hora si es posible, momento a momento, aunque sea unos pocos minutos. Esta es la más fácil y mejor de las protecciones que podrás tener.


fuente:SinParadigmas

24.1.13

Cada Vez Somos Más - Desobediencia Civil

por Lice Moreno

Desobediencia Civil, parece fuerte, pero ¿qué otro camino queda?
Conocí a Lice Moreno en Bilbao, como ponente en el 22º Congreso Ibérico e Internacional de Investigación en Astrología en el 2.005, en el cual compartí con él escenario de exposición, todo un lujo para mí, un aficionado en esa área, es como jugar al lado de Messi y mejor que contra él, de todas maneras un honor.
Me llega esta su reflexión y su conclusión y tal parece que estuviésemos compartiendo criterios y reflexiones todo el tiempo, cosa que me gustaría por cierto. Ahora lo sabemos, el imperio a falta de nuevas ideas se hace cada vez más violento y descarado en su afrenta contra los pueblos y contra la vida misma.
Un maestro de colegio me pregunta en una conferencia qué esperanza había para solucionar el problema escolar, le dije ninguno, mientras continuemos con el actual sistema de antivalores peloteando a la Humanidad, porque el modelo educativo fue inventado por el sistema materialista para que le preparara a los soldados que ayudarían a esclavizar al resto; y por la misma cañería viajan todos los demás asuntos.
Ha llegado el tiempo en el cual el sistema de antivalores se va a pique como un Titanic ya quebrado, pues su tiempo se ha terminado, ¿y quien dice que no está quebrado?
Así que mejor tomar las balsas y alejarse, no sea que te quedes merodeando y te sumerjas en el borbotón del naufragio anunciado por más de un visionario para esta época y si no me crees, observa al sol, no le pierdas la pista porque está decidiendo los grandes cambios, en verdad la Gran ayuda para la Humanidad.



DESOBEDIENCIA CIVIL

Hace dos mil años, le preguntaron capciosamente a Jesús el Cristo, si debían pagar tributo al Cesar.
El pidió una moneda y enseñándosela a los presentes, dijo:
¿De quién es esta figura? - Del Cesar, respondieron. El Maestro contestó: - “Pues dar al Cesar lo que es del Cesar y a Dios lo que es de Dios”.
¿Por qué esta introducción?....
En el mundo actual, son el “G-8” y el “G-20”, movimientos de naturaleza económica los que dirigen el mundo. Estos grupos están formados lógicamente por las naciones más ricas del mundo.
Un movimiento económico no puede dirigir el mundo. Tiene que ser una idea, un principio, una directriz moral o una filosofía, que busque la justicia social, el progreso armónico y la dignidad de los seres humanos y de las naciones. Pero un movimiento económico, no tiene alma, es un depredador sin alma, que busca más beneficios y perpetuar el estatus de unos pocos sobre la mayoría.
Todos los gobernantes del mundo, dejando de lado sus principios morales y las formas éticas, se someten al dictamen económico de estos grupos o de otros tantos grupos de poder.
Y al seguir estas directrices, se incumplen los valores de la justicia y los valores morales, éticos y sociales que deben dirigir al pueblo.
Mi pregunta es esta:
¿Debemos seguir las normas, las leyes y las recomendaciones, impuestos y normas de nuestros dirigentes?
Si las seguimos, incumplimos los valores elementales que forman parte del derecho natural, de los valores éticos universales y los valores espirituales.
¿Debemos dar al Cesar de nuestro tiempo su tributo? Yo creo que no.
Pero estos grupos de poder equivocado, para que tú cumplas sus normas, se dotan de leyes, de represión, de ejércitos y de instrumentos represores que no puedes ignorar.
Nos cobran por todo y nos controlan en todo.
Tengo un paciente encantador, que es teólogo. Hombre de fe y práctica religiosa ordenada.
En nuestros coloquios amenos y tolerantes yo le digo:
- Antonio, dentro de poco nos van a cobrar un impuesto por hacer el amor. Cada vez que suba la temperatura de los genitales, un sensor térmico, enviará por radiofrecuencia un impulso al Ministerio de Hacienda y te aplicaran el impuesto correspondiente. Hoy en día tenemos una tecnología, que con un simple sensor extrafino de silicona electromagnético, puesto bajo la piel basta.
- ¡Que bruto eres Lice!, ¿Cómo van a hacer esto? Es una barbaridad.
- Pues mira por donde, mi querido amigo, que la Iglesia, desde hace 2000 años, cada vez que se hacia el amor, imponía un gravamen más fuerte. El del pecado. El clero tuvo la habilidad de aplicar una culpa a un acto absolutamente natural, libre y espontáneo. Y este impuesto psicológico, creó a toda la Humanidad un sentimiento de culpa que generó un estado psicopatológico, amargando la vida de propios y extraños.
La risa y la broma termina con nuestro coloquio, pero Antonio, se va preocupado, por si mañana le llaman para implantarle un electrodo en el pene, pues a este paso pagaremos por absolutamente todo.
Hace unos meses intenté instalar en mi casa paneles solares, a fin de contribuir al problema energético al que la Humanidad se debe enfrentar en un futuro.
Solicité en el Organismo correspondiente la autorización para instalarlos y justo en ese momento comenzó mi calvario.
Me pidieron,
escrituras
informes de catastro
modelo de instalación
plano de la instalación
informe de impacto visual
impacto ambiental, etc., etc.
Me quedé alucinado, puesto que reunir todo este material y los informes suponían un montón de dinero, que al pagarlo desnivelaba el presupuesto que tenía para los paneles.
Casi al instante evoqué la figura de Akhenatón, cuando instauró el Culto Solar, aboliendo la adoración a dioses, y las prebendas de las castas sacerdotales.
¿Quién podría imaginar entonces que nos cobrarían por recibir la luz del Sol?
Si te vas al campo y pones una cabra, te cobran por la cabra, o por la gallina que te da huevos.
Te cobran por el árbol que da fruto, te cobran por trabajar, por el agua, por la luz, por aprender, por vivir.
Te cobran por tu entierro aun estando en vida.
Te cobran por purificar el aire en las ciudades, o por drenar el agua de los ríos.
Imaginad a un indio piel-roja, de hace dos siglos, que le dicen que en este siglo el Estado cobra por el agua que se consume.
¡Eso sí!... nos dicen que somos 'libres'.
Quizás lo seamos, pero nos está costando mucho dinero. Y además esta libertad, no tiene que ver nada con la verdadera libertad que requiere nuestro espíritu y nuestra dignidad.
En España tenemos un veinte por ciento de parados y un cuarenta por ciento de paro juvenil. En Canarias, donde vivo, el porcentaje sube respectivamente a un treinta y cuatro por ciento de paro y un cincuenta de paro juvenil. Y a pesar de todo no podemos hacer nada para que los que dirigen el país se marchen y nos dejen en paz.
La 'democracia' lo impide y tenemos que asistir a nuestra agonía, en nombre de la Ley.
Creo sinceramente que debemos cambiar nuestras formas de vida si queremos preservar los valores del espíritu y la libertad del alma. Es el momento de vivir lo más posible fuera del sistema.
Si no queremos ser envenenados
tendremos que producir nuestro propio alimento
tendremos que regresar al campo, emplear más la moneda de la solidaridad
tendremos que utilizar el vestido, la comida, y los medios imprescindibles que necesitemos para ser felices, pero nunca lo superfluo
Votar ahora mismo en mi país, contribuyendo al estatus degenerativo de los valores y de la economía donde nos movemos, puede ser legal, pero es un delito moral, contribuir con nuestro voto a perpetuar este estado de cosas.
Nuestros nietos nos dirán:
- Pero tú formaste parte de este tiempo y de este estado de cosas y no hiciste nada para pararlo.
Ni podemos darle el tributo a este cesar gobernante ni podemos adorar al dios que nos venden los religiosos. Todo ha cambiado, todo está equivocado y vamos en forma pasiva hacia el precipicio de la sociedad.
Tened la seguridad, que si el mundo sigue gobernado por un colectivo económico, sin alma, el cambio con dolor, la guerra, o el final de un ciclo esta próximo.
Ir al campo, no significa ir con una cabra a una cueva. Tenemos que llevar una conexión a Internet, para estar conectados con las personas y colectivos que viven como tú. Tenemos que tener lo necesario para comer y los medios para producirlo y tenemos que tener un seguro médico, mínimo para cuidar de nuestra salud.
Con Internet, tenemos cultura y esto es vital para aprender.
No hace falta tener un fontanero, un médico, un carpintero o un agricultor, puesto que todos estos oficios están entre las personas que piensan como tú y simplemente emplean el capital de la solidaridad compartiendo con alegría. Si tú me das un huevo yo te doy un poco de miel, pues yo vivo en lo alto del monte y tú en la llanura. Si tú me arreglas esta máquina, yo te doy un masaje.
Hay que hacer una revolución, y no he conocido ningún revolucionario mejor que Gandhi.
Os recomiendo que veáis su película, que de momento se puede bajar por Internet. Veréis, un ser que se opuso al imperio más fuerte de la Tierra, en el tiempo que le tocó vivir, y le venció, con la “no violencia”. Supo salirse del sistema y agotó la paciencia y la economía del imperio Inglés.
A mí siempre me ha apasionado el modelo esenio. Monjes de antes del Cristo, que empleaban la mitad del día en trabajar su autosuficiencia en el huerto y la otra mitad, empleaban su tiempo en el culto de su espíritu.
Quizás no conocéis su historia. Haré por tanto un pequeño homenaje a estos monjes, retomando lo que de ellos dijo el historiador de la época, Flavio Josefo.
Mientras tanto, seguiré invitándoos a esta pequeña revolución que nos haga más libres y menos dependiente del sistema.

fuente:TeAtrevesADespertar

19.1.13

Los GUIs

capitulo anterior

de Neal Stephenson

Lo primero que tiene que hacer cualquier progamador al escribir un nuevo fragmento de software es decidir cómo tomar la información con que está trabajando (en un programa gráfico, una imagen; en una hoja de cálculo, una tabla de números) y convertirla en una serie lineal de bytes. Estas sartas de bytes se denominan habitualmente archivos o (de modo algo más a la última) flujos. Son a los telegramas lo que los humanos actuales son al hombre de Cromagnon, lo que quiere decir la misma cosa con distinto nombre. Todo lo que se ve en la pantalla del ordenador - Tomb Raider, los correos electrónicos de voz digitalizada, los faxes, y los documentos de procesador de textos escritos en treinta siete tipos diferentes - sigue siendo, desde el punto de vista del ordenador, igual que telegramas, sólo que son mucho más largos, y requieren más aritmética.
El modo más rápido de apreciarlo es encendiendo el navegador, visitando un sitio web, y seleccionando el ítem Ver Código Fuente en el menús. Saldrá código informático parecido a éste:


Esto se llama HTML, Lenguaje de Marcado de HiperTexto, y básicamente es un lenguaje de programación muy sencillo que le dice al navegador cómo dibujar una página en la pantalla. Cualquiera puede aprender HTML y mucha gente lo hacer. Lo importante es que, por muchas espléndidas páginas multimedia que representen, los archivos de HTML son sólo telegramas.
Cuando Ronald Reagan era locutor de radio, solía informar de los partidos de béisbol leyendo las concisas descripciones que llegaban por el telégrafo y se imprimían en cinta de papel. Se sentaba solo en una habitación insonorizada con un micrófono, y la cinta de papel salía de la máquina y le caía en la palma de la mano, cubierta de crípticas abeviaturas. Si el tanteo pasaba de tres a dos, Reagan describía la escena como se la imaginaba: El fornido zurdo sale del puesto de bateo para secarse el sudor. El árbitro se adelanta para limpiar el polvo de la base etc. Cuando el criptograma en la cinta de papel anunciaba un golpe en una base, Reagan golpeaba el borde de la mesa con un lápiz, creando un pequeño efecto sonoro, y describía el arco de la pelota como si pudiera verlo de verdad. Sus oyentes, muchos de los cuales presumiblemente creían que Reagan estaba de hecho en el campo de juego viendo el partido, reconstruían la escena en su mente según sus descripciones.
Así es exactamente como funciona la WWW: los archivos HTML son la concisa descripción en la cinta de papel, y el navegador es Ronald Reagan. Lo mismo vale para los GUIs en general.
Así que un sistema operativo es un montón de metáforas y abstracciones que media entre los telegramas y tú, encarnando diversos trucos que el programadosr usó para convertir la información con la que estás trabajando - ya sean imágenes, mensajes de correo electrónico, películas, o documentos de procesador de textos - en las sartas de bytes que son lo único con lo que funcionan los ordenadores. Cuando usamos equipo telegráfico genuino (teletipos) o sus sustitutos de alta tecnología (teletipos de vidrio, o la línea de comandos de MS-DOS) para trabajar con nuestros ordenadores, estamos muy cerca de la base de este montón. Cuando usamos la mayor parte de sistemas operativos modernos, sin embargo, nuestra interacción con la máquina se ve fuertemente mediada. Todo lo que hacemos es interpretados oy traducido una y otra vez mientras se abre camino a través de todas las metáfora y abstracciones.
El sistema operativo de Macintosh fue una revolución en el buen y en el mal sentido. Obviamente era cierto que las interfaces de línea de comandos no eran para todo el mundo, y que estaría bien hacer los ordenadores accesibles a un público menos técnico - si no porrazones altruistas, entonces porque este tipo de persona constituía un mercado incomparablemente mayor. Está claro que los ingenieros del Mac vieron todo un país nuevo que se les abría; casi podías oírles mascullas, ¡Caray! ¡Ya no tenemos que limitarnos a los archivos como flujos lineales de bytes, vive la revolution, veamos lo lejos que llegamos con esto!. No había ninguna interfaz de línea de comandos disponible en el Macintosh; hablabas con la máquina a través del ratón, o no hablabas. Ésta era una especie de declaración de principios, una credencial de pureza revolucionaria. Parecía que los diseñadores del Mac pretendían barrer las Interfaces de Línea de comandos a la papelera de la historia.
Mi propia historia de amor con el Macintosh comenzó en la primavera de 1984 en una tienda de ordenadores en Cedar Rapids, Iowa, cuando un amigo mío - por coincidencia, el hijo del dueño del descapotable - me mostró un Macintosh ejecutando MacPaint, el revolucionario programa de diseño. Terminó en julio de 1995 cuando traté de guardar un archivo grande e importante en mi Macintosh Powerbook y en vez de eso destruyó los datos de modo tan concienzudo que dos programas distintos de recuperación de datos fueron incapaces de hallar rastro alguno de que hubiera existido jamás. En aquellos diez años, sentía una pasión por el MacOS que en aquel momento parecía virtuosa y razonable, pero que mirando atrás me parece el mismo tipo de enamoramiento engañoso que el padre de mi amigo tenía con su coche.
La introducción del Mac inició una especie de guerra santa en el mundo de la informática. ¿Eran los GUIs una brillante innovación tecnológica que convertía a los ordenadores en más accesibles para los humanos y por tanto para las masas, llevándonos a una revolución sin precedentes en la sociedad humana, o una insultante chorrada audiovisual diseñada por hackers zumbados de San Francisco, que despojaba a los ordenadores de su potencia y flexibilidad y convertía el serio y noble arte de la computación en un pueril videojuego?
Este debate, de hecho, me parece más interesante hoy en día que a mediados de los 80. Pero la gente más o menos dejó de debatir cuando Microsoft respaldó la idea de losGUIs al sacar el primer Windows. En aquel momento, los partidarios de la línea de comandos se vieron relegados al status de viejos carcamales, mientras se disparaba un nuevo conflicto entre usuarios de MacOS y usuarios de Windows.
Había mucho sobre lo que discutir. Los primeros Macintosh parecían distintos de otrosPCs incluso estando apagados: consistían en una caja que contenía tanto la CPU(la parte del ordenador que hace aritmética con los bits) como la pantalla del monitor. Esto suponía, en aquel momento, una especie de afirmación filosófica: Apple quería convertir el ordenador personal en un electrodoméstico, como la tostadora. Pero también reflejaba las exigencias puramente técnicas de ejecutar una inferfaz gráfica de usuario. En una máquina deGUI, los chips que dibujan las cosas en la pantalla tienen que ir integrados con la unidad de procesamiento central, o CPU, del ordenador, en un grado mucho mayor que en las interfaces de línea de comandos, que hasta hace poco ni siquiera sabían que no estaban hablando sólo con teletipos.
Esta distinción era de naturaleza técnica y abstracta, pero se hacía más clara cuando la máquina fallaba (como sucede frecuentemente con tecnologías cuyo funcionamiento se comprende mejor viéndolas fallar). Cuando todo se iba a la porra y laCPU empezaba a escupir bits aleatoriamente, el resultado, en una máquina de interfaz de línea de comandos, era líneas y líneas de caracteres perfectamente formados pero aleatorios en la pantalla - lo que los conocedores conocían como ponerse cirílico. Pero para el MacOS la pantalla no era teletipo sino un lugar en el que poner gráficos; la imagen en pantalla era un mapa de bits, una representación literal de los contenidos de una parte dada de la memoria del ordenador. Cuando el ordenador fallaba y escribía tonterías en el mapa de bits, el resultado era algo que recordaba vagamente a la nieve en una televisión estropeada - un snow crash.
E incluso tras la introducción de Windows, las diferencias subyacentes persistieron; cuando una máquina Windows tenía problemas, la vieja interfaz de línea de comandos caía sobre el GUIcomo un telón de amianto sellando el escenario de una ópera incendiada. Cuando un Macintosh tenía problemas te presentaba el dibujito de una bomba, que resultaba gracioso la primera vez que los veías.
Y éstas no eran en absoluto diferencias superficiales. El retorno de Windows a una interfaz de línea de comandos cuando tenía problemas les demostraba a los partidarios del Mac que Windows no era más que una fachada barata, como una chillona manta afgana tendida sobre un sofa putrefacto. Les perturbaba y molestaba la sensación de que bajo la ostensiblemente amistosa interfaz de usuario de Windows había - literalmente - un subtexto.
Por su parte, los fans de Windows podrían haber observado agriamente que todos los ordenadores, incluso los Macintosh, estaban construidos sobre ese mismo subtexto, y que la negativa de los dueños de Macs a admitir ese hecho parecía apuntar a una voluntad, incluso un deseo, de engañarse.
En cualquier caso, un Macintosh tenía que mover bits individuales en los chips de memoria en la tarjeta de vídeo, y tenía que hacerlo muy rápido, y en patrones arbitrariamente complicados. Hoy en día esto resulta barato y fácil, pero en el régimen tecnológico vigente a principios de los 80, el único modo realista de hacerlo era integrar la placa base (que contenía la CPU) y el sistema de vídeo (que contenía la memoria proyectada sobre la pantalla) como un todo - de ahí el único contenedor, herméticamente sellado, que hacía al Macintosh tan distintivo.
Cuando salió Windows, llamaba la atención por su fealdad, y sus actuales sucesores, Windows 95 y Windows NT, no son cosas que la gente pagaría por ver. La absoluta falta de atención de Microsoft por la estética nos daba a todos los amantes del Mac muchas oportunidades para mirarles por encima del hombro. El que Windos se pareciera un montón a un calco directo de MacOS nos daba además una fuerte sensación de ultraje moral. Entre las personas que realmente conocían y apreciaban los ordenadores (los hackers, en el sentido no peyorativo que Steven Levy le da a la palabra) y unos pocos otros ámbitos como los músicos profesionales, los artistas gráficos y los maestros, el Macintosh, durante un tiempo, era simplemente el ordenador. No sólo se consideraba una obra soberbia de ingeniería, sino la encarnación de ciertos ideales acerca del uso de la tecnología para beneficiar a la humanidad, mientras que Windows se consideraba una imitación patéticamente torpe y una siniestra combinación para dominar el mundo, todo en uno. Ya entonces se había establecido un patrón que persiste hasta nuestros días: a la gente no le gusta Microsoft, lo cual es aceptable; pero no les gusta por razones mal consideradas y en último término contradictorias.


fragmentos de EN EL PRINCIPIO FUE LA LINEA DE COMANDOS

15.1.13

La Locura Del Ego. Un Extraordinario Paralelo Budista Gnóstico

por John L. Lash

La Locura del Ego revela un extraordinario paralelo gnóstico-budista: el demente dios alienígena Yahvé es equiparado con un demonio o entidad delirante de los budistas, por medio del uso de citas textuales.
Hay una contundente evidencia para aquella cercana correlación y quizá fertilización histórica cruzada entre budismo y Gnosis.
Así describe resumidamente el propio autor, el erudito señor Lash, desde su sitio metahistory.org, el asunto de este texto que ahora presentamos en castellano por lo atrayente que pueda resultar para los interesados en los temas gnósticos y en sus núcleos temáticos mitológicos, además obviamente de aportar al acervo de cualquiera persona que se cultive de modo general.

El mito gnóstico de la Creación ha sido llamado "teología de ciencia-ficción" debido al modo en que presenta el material teológico en un simbolismo fantástico, propio de la era espacial.
La figura de ciencia-ficción más llamativa en la cosmología gnóstica es Yaldabaoth, el demiurgo o falso dios creador. Gnósticos como Marción identificaron a Yaldabaoth con el dios creador masculino del Antiguo Testamento, Yahweh, y por consiguiente negaron a aquella entidad cualquier papel en la buena dirección de la Humanidad.
Al contrario, Yahweh-Yaldabaoth es una deidad demente, un dios que trabaja contra la Humanidad. En la revisión gnóstica del Antiguo Testamento, está claro que el status monoteísta exigido por Yahweh es debido a la locura del pseudo-dios.
¿Pero qué debemos hacer con este caso único de locura cósmica?.

Accidente Cósmico

La Hipóstasis de los Arcontes y otros tratados cosmológicos describen cómo Yaldabaoth surge del caos de la materia elemental debido al impacto del eón Sofía en las "aguas inferiores", el reino de los brazos de la galaxia fuera del núcleo galáctico (Pleroma).
El descenso de Sofía desde el núcleo produce un "aborto" o nacimiento prematuro en los reinos elementales. Normalmente, las formas de vida que aparecen en los mundos estelares de los brazos de la galaxia son emanadas desde dentro del Pleroma, infundidas y conformadas por el diseño divino antes de que ellas se manifiesten.
Pero los Arcontes producidos por el impacto de Sofía surgen sin haber sido prefigurados por los dioses plerómicos. El "aborto" es un bodrio amorfo, como un feto prematuro, con sus órganos incompletamente formados y con sus facultades atrofiadas.
¿Puede el descenso de Sofía ser considerado como un accidente cósmico?. Quizá, en cierto modo, puede serlo.
Los accidentes suceden en el cosmos en general. En los comentarios al Mito de Gaia he sostenido que el Descenso de Sofía puede ser una descripción mitopoyética de un aumento de tensión desde el núcleo galáctico. Los científicos han descubierto recientemente en la galaxia un canal parecido a un túnel, extendiéndose directamente desde el núcleo de la galaxia hacia la región de los brazos envolventes donde el (nuestro) Sistema Solar está localizado.
Tal aumento de tensión es central en la teoría del doctor Paul LaViolette de la super-onda galáctica o descarga cósmica de rayos. LaViolette sostiene que como la "descendencia" de las estrellas se establece alrededor del núcleo galáctico, su gravitación se hace más profunda y su temperatura interna y energía aumentan hasta un nivel máximo:
La emisión de energía desde el núcleo galáctico finalmente llega a ser tan grande que se desarrollan inestabilidades que hacen que explote.
Durante este modo activo temporal, su luminosidad aumenta en millones de veces, y libera una intensa descarga de partículas de rayos cósmicos y radiación de alta energía que viaja radialmente hacia el exterior en forma de una cáscara en expansión llamada una super-onda galáctica (Genesis of the Cosmos, p.93).
Huelga decir que éste es un acontecimiento extremadamente violento con consecuencias letales y catastróficas masivas - según la visión de LaViolette, en todo caso. En mi revisión del mito gnóstico, doy por hecho que el cosmos entero está vivo, animado y animando. Una super-onda galáctica, o sobrecarga desde el núcleo galáctico, podría no ser una descarga letal de rayos cósmicos, después de todo.
Esto podría ser una oleada de fuerza divina de vida, incluso una efusión de una inmensa ternura, o una ondulación de deseo cósmico. Así es ciertamente cómo la mitología gnóstica describe el descenso de Sofía.
El paralelo astrofísico con el mito gnóstico es interesante, pero eso no debería llevarnos a pensar que el mito necesita verificación científica para ser verdadero, o para ser valorado como verdadero. Si hay periódicas oleadas cósmicas desde el núcleo galáctico, haríamos bien en entender tales fenómenos en términos imaginativos, y en lenguaje psicológico, porque así es cómo podemos comenzar a ver la complementariedad de psique y cosmos.
A primera vista, la narrativa acerca del Demiurgo parece ser un acontecimiento único, aislado, a diferencia de todo lo demás en la mitología mundial. Muchos estudiosos han asumido que la figura de Yaldabaoth es totalmente anómala, un inusitado mitologema [elemento central de un mito] encontrado sólo entre aquellos extravagantes fantasistas, los gnósticos.
Pero resulta que hay un paralelo exacto de la figura gnóstica del Demiurgo. Se encuentra en las tradiciones sagradas del budismo.

El Génesis Budista

Éste es quizá el último lugar donde uno tendería a mirar.
¿Por qué? Porque las enseñanzas budistas no dan mucha importancia a la génesis misma del universo. La Creación no está en la sintaxis budista. Todas las condiciones que se presentan en el cosmos son sólo eso: condiciones que surgen.
Todas las actuales condiciones, físicas y psicológicas, lejanas y cercanas, interiores y exteriores, provienen de las precedentes, según la ley del "inicio interdependiente", y eso es todo lo que hay. Si el cosmos está en un eterno devenir, es un ejercicio vano tratar de determinar un momento distinguible en la creación.
Además, el budismo tiende a enfatizar la naturaleza fantasmal de todos los fenómenos; este enfoque es llamado docetismo en el análisis textual gnóstico. ¡El cosmos no sólo es un eterno llegar-a-ser, sino que es también la mera apariencia de un eterno devenir!.
¿Dónde cabe la noción de Creación en una visión del mundo tal?.
Sorprendentemente como pudiera parecer, existen algunos indicios de lo que puede ser llamado un mito budista de la Creación, un homólogo budista del Génesis, si usted prefiere.
Las fuentes textuales son variadas, y tienden a ser en gran parte pasadas por alto en la actual atmósfera de estudios budistas. Lo que más ciertamente es un relato pre-budista de la creación del mundo, puede ser encontrado en fuentes Pali como,

•    el Dighanikaya
•    el Anuguttaranikaya
•    el Vishuddhimagga, "El Camino de Perfección"
Las obras en lengua Pali pertenecen a una subcategoría de élite de los estudios budistas modernos, de modo que no es sorprendente que estos materiales hayan sido pasados por alto.
Pero al menos dos textos sánscritos, el Abhidharmakosha y el Shikshasamuccaya, también contienen elementos del Génesis budista.
Según John Mrydhin Reynolds ("Self-Liberation through Seeing in Naked Awareness") estas fuentes antiguas nos dicen que Gautama, el Buda histórico, explicó a sus seguidores que,
la Humanidad que se encontraba en este planeta Tierra alguna vez habitó otro sistema planetario. Épocas atrás cuando el sol de aquel mundo se convirtió en una nova y el planeta fue destruido por las consiguientes erupciones solares, el grueso de sus habitantes... renació en uno de los planos más elevados del Mundo de las Formas o Rupadhatu, un plano de existencia conocido como Abhasvara o "luz clara".(p.99)
Aquí hay una descripción increíblemente clara de un acontecimiento físico, una estrella convirtiéndose en una nova, combinado con un acontecimiento metafísico, la transmigración de los habitantes de un planeta que rodeaba a aquella estrella hacia otro plano de existencia.
El lenguaje en uso refleja, en parte, la sintaxis científica corriente de la teoría de la super-onda galáctica de LaViolette. Los científicos saben que las novas son acontecimientos relativamente comunes, mientras que la super-onda es todavía en gran parte teórica. Lo mismo vale para el acontecimiento físico.
En cuanto al acontecimiento metafísico de la transmigración planetaria, un drama cósmico se despliega ahora.
La Humanidad que habitó ese sistema colapsado fue transportada al plano Rupadhatu debido a su afanosa práctica del Dharma [deberes religiosos], dicen las fuentes antiguas.
Allí "ellos disfrutaron de una inconcebible dicha y felicidad durante innumerables eones" (ibíd.)
Pero cuando aquellas condiciones kármicas expiraron, otro mundo, la actual Tierra, se estaba formando entonces, y algunos de los habitantes llenos de dicha del plano Rupadhatu fueron atraídos hacia allá y comenzaron a renacer en aquella región, aunque no todavía en el planeta emergente mismo.
El reino intermedio donde ellos encarnaron era llamado Brahmaloka, "la Zona del Creador". (En el mito hindú y en la meta-psicología budista, Brahma es el "dios creador").
Al principio, los seres transmigradores (que somos nosotros) no comprendieron exactamente dónde estaban ellos o lo que les estaba sucediendo.
El primero que realmente se despertó y consiguió una percepción de estar en este nuevo reino, inmediatamente dijo:
"Soy el Creador".
La primera entidad habló de esta manera porque las condiciones de conciencia en las cuales vino a verse eran las de la Zona del Creador, Brahmaloka.
Esta entidad, que era una manifestación de la Humanidad, llegó a creer que "él" era realmente el creador del universo que estaba contemplando a su alrededor. Él no recordaba que llegó desde un mundo anterior que había sido destruido, y él apareció como si hubiera nacido sin ningún padre.
En ausencia de pruebas contrarias, él cayó en la ilusión de ser el único creador del mundo emergente que estaba contemplando.
J.M. Reynolds comenta:
En realidad, la manifestación de este universo fue debida al karma colectivo de todos en ese grupo, y a la propia manifestación individual de él, que como un caso de nacimiento fantasmal, fue debida a su propia gran reserva de karma meritorio que llegaba a su maduración en ese tiempo, porque las condiciones secundarias necesarias estaban presentes.
Sin embargo, él persistió en su falsa ilusión, en esta idea de que él era el verdadero Creador del universo porque él fue el primer nacido dentro del sistema solar evolutivo y no vio a otros allí antes de él.
Pero esta creencia era sólo su limitación y su oscurecimiento, una ignorancia primordial de su verdadero origen.
Todo esto, reconozco, para el juicio de algunos aparenta ser ciencia-ficción de la mejor.
La correlación punto por punto de los elementos budistas y gnósticos aquí es fabulosa. El "nacimiento fantasmal" del delirante Creador tiene un paralelo con el "aborto" del Mito de Sofía. La falsa ilusión del autoproclamado Creador es idéntica en ambas narrativas. El gnóstico Demiurgo también es "nacido dentro del sistema solar evolutivo" y "no vio a otros antes de él".
Yaldabaoth es el jefe de los Arcontes, las entidades que son así llamadas porque ellas surgieron primero, antes de que la Tierra, el hábitat de la Humanidad, fuera formada. La palabra Arconte proviene del griego archai, "origen, comienzo, desde el principio".
Parece que la zona intermedia, el inferior Rupadhatu, corresponde al caos exterior del mito gnóstico.
Allí es donde surge el Demiurgo, apareciendo de la nada:
"un caso de nacimiento fantasmal".
Yaldabaoth es ciego (en copto, BILLE) e ignorante de sus verdaderos orígenes. En la narrativa budista como en la gnóstica, la ignorancia primordial del Creador contaminará a la raza humana entera.
Los paralelos son asombrosos y consistentes, excepto en un punto: Los textos gnósticos no dicen nada sobre el Demiurgo como teniendo "su propia gran reserva de karma meritorio".
Sin embargo, ellos describen cómo Yaldabaoth y los Arcontes son beneficiarios de la sabiduría cósmica de Sofía, la diosa que los genera.
El gnóstico Demiurgo es una entidad vacía, parecida a un clon, incapaz de crear algo, pero a pesar de ello la maravilla del mecanismo de relojería del sistema planetario es creada mediante él (y sus agentes) por los poderes ocultos impartidos por Sofía.
Hay quizás un paralelo aquí, después de todo, pero es ciertamente extraño pensar en el Señor Arconte como una entidad que tiene una provisión de buen karma.

Egolatría Cósmica

La deidad de Brahmaloka es delirante, pero tal vez no tan desquiciada como es retratado siéndolo Yaldabaoth. En ambos casos, el núcleo de la ilusión es el sentido del yo, la creencia en la existencia de un yo duradero.
Reynolds dice que la ilusión de la despertada entidad fue,
"la primera aparición del ego o la creencia en la existencia real de un yo, en nuestro universo".
La ilusión del ego no es la causa del universo que contemplamos, pero es el factor principal en nuestra percepción errónea del universo. Esta observación concuerda muy de cerca con la teoría gnóstica del error.
El drama continúa, ya que el resto de la Humanidad transmigradora no ha despertado todavía a su vida en el sistema del nuevo mundo.
"Por cuanto él fue el primero entre los Brahmas en haber nacido de nuevo en Abhasvara, él llegó a ser conocido como el Mahabrahma o Dios".
Después de existir en un solitario esplendor durante muchos eones mientras "el sistema solar se desarrollaba" (Reynolds), Mahabrahma anheló sujetos para que presenciaran su gloria.
En el mismo momento en que él sintió este deseo, el karma de los otros no despertados Brahmas maduró, y ellos emergieron desde su sopor en el bardo [en tibetano, estado intermedio o de transición].
Al instante, Mahabrahma les declaró:
"¡Yo soy Dios, vuestro Creador!".
Esto era absurdo, porque estos seres surgieron debido a su propia maduración kármica y no por una orden de él o su conjuro creativo.
Mahabrahma entonces,
"organizó a estos innumerables seres que estaban apareciendo en el espacio en torno a él en jerarquías celestes bien ordenadas".
En la narrativa gnóstica, Yaldabaoth, el Señor Arconte, les ordena a sus acólitos parecidos a clones que creen un despliegue virtual (stereoma) de mundos jerárquicos que reflejen el caleidoscopio fractal viviente de las corrientes conscientes y animadas del Pleroma, el núcleo galáctico.
El Demiurgo sólo puede imitar, él no puede crear u originar. Los textos gnósticos son claramente sarcásticos en la descripción de las jerarquías celestes de los Arcontes, porque para los gnósticos toda esta pretenciosa cursilería celestial no tiene nada que ver con la maravilla de la vida que se desplegará en la Tierra, el reino donde Sofía está encarnada.
La Tierra es donde la Humanidad surge. Es el hábitat único del Anthropos.
La enseñanza gnóstica es inequívoca en la diferencia entre las especies producidas por el descenso de Sophia y la especie humana. De manera interesante, la narrativa budista no hace tal distinción. En ella se relata que Mahabrahma llegó a estar rodeado por crecientes números de humanos reencarnados, transmigrantes del mundo cuyo sol se convirtió en una nova.
Estos Brahmas menores forman su séquito, y ellos creen absolutamente que él es el creador del reino donde ellos ahora se encuentran.
El mito budista de la creación especifica todas las diferencias entre los seres que surgen alrededor de Mahabrahma y los seres humanos:
"Gradualmente, como el tiempo transcurrió, debido a la presencia de una serie de causas secundarias, algunos de estos Brahmas ingresaron en el ciclo de la existencia material y comenzaron a ser renacidos en la superficie de la recién desarrollada Tierra, primero como animales y luego más tarde como seres humanos"(p. 100).
La narrativa budista le sigue la pista a la transmigradora Humanidad desde un planeta cuyo sol se transformó en una estrella nova hasta la Tierra que habitamos, un alcance visionario notable.
A diferencia del símil gnóstico, ella no distingue en el séquito de Mahabrahma entre los seres humanos y los Arcontes, la legión de clones que sigue al Demiurgo. El relato budista no hace ninguna declaración en absoluto sobre entidades no-humanas en el Sistema Solar. La narrativa gnóstica permanece absolutamente única en lo referente a aquel factor.
Además, la tradición budista asume que la Tierra pertenece al sistema solar que surge debajo del plano Rupadhatu, pero la tradición gnóstica considera que la Tierra realmente no pertenece al sistema planetario sino que simplemente está atrapada por él.
Estas correlaciones gnósticas-budistas son extraordinarias, tanto en lo que ellas divergen como en lo que convergen.
Hay más reflexiones sobre el creacionismo y el egotismo cósmico, que se encuentran en los trabajos del sabio Nyingma, Long Chen Pa, en la parte concluyente de este ensayo.


fuente:Editorial-Streicher

1.1.13

UNA CIVILIZACIÓN REPENTINA

por Zecharia Sitchin

Durante mucho tiempo, el hombre occidental ha creído que su civilización era el legado de Roma y Grecia, pero los mismos filósofos griegos dijeron en repetidas ocasiones que su saber lo habían extraído de fuentes aún más antiguas. Más tarde, los viajeros que volvían a Europa después de pasar por Egipto hablaban de imponentes pirámides y de ciudades-templo medio enterradas en la arena, custodiadas por extrañas bestias de piedra llamadas esfinges.
Cuando Napoleón llegó a Egipto en 1799, hizo venir a algunos de sus eruditos para que estudiaran y explicaran aquellos antiguos monumentos. Uno de sus oficiales encontró cerca de Rosetta una losa de piedra en la que había inscrito un edicto de 196 a.C. escrito en la antigua escritura pictográfica egipcia (jeroglíficos)
así como en otros dos alfabetos diferentes.
El desciframiento de la escritura y la lengua del antiguo Egipto, junto con los esfuerzos arqueológicos que siguieron, desvelaron al hombre occidental que había existido una gran civilización en aquel lugar mucho antes del advenimiento de la civilización griega. Las anotaciones egipcias hablaban de dinastías reales que comenzaban alrededor del 3100 a.C, dos milenios antes del inicio de una civilización helénica que, alcanzando su madurez entre los siglos v y iv a.C, era más una advenediza de última hora que una engendradora de civilizaciones.
¿Acaso el origen de nuestra civilización se encontraba en Egipto?
Por lógica que pudiera parecer esta conclusión, los hechos militaban en contra. Los eruditos griegos hablaban de visitas a Egipto, pero las antiguas fuentes de conocimiento de las que hablaban se encontraban en algún otro lugar. Las culturas pre-helénicas del Egeo -la cultura minoica de la isla de Creta y la micénica de la Grecia continental- ofrecían evidencias de que había sido una cultura de Oriente Próximo, y no la egipcia, la cultura de donde habían bebido los griegos. Siria y Anatolia, y no Egipto, eran las principales avenidas a través de las cuales había llegado hasta los griegos una civilización aún más antigua.
Al darse cuenta de que la invasión dórica de Grecia y la invasión israelita de Canaán, que siguió al éxodo de Egipto, tuvieron lugar casi al mismo tiempo (alrededor del siglo XIII a.C), los estudiosos comenzaron a descubrir cada vez más similitudes entre las civilizaciones semitas y helénica. El profesor Cyrus H. Gordon (Forgotten Scripts; Evidence for the Minoan Language) abrió nuevos horizontes a la investigación al demostrar que una primitiva escritura minoica, llamada Lineal A, parecía pertenecer a una lengua semita. Gordon llegó a la conclusión de que «el diseño (a diferencia del contenido) de las civilizaciones hebrea y minoica es, en gran medida, el mismo», y señaló que el nombre de la isla, Creta, deletreado en minoico como Ke-re-ta, era muy similar al de la palabra hebrea Ke-re-et («ciudad amurallada»), y tenía su homólogo en un relato semita de un rey de Keret.
Incluso el alfabeto griego, del cual derivan el alfabeto latino y el nuestro, proviene de Oriente Próximo. Los mismos historiadores griegos de la antigüedad escribieron que un fenicio llamado Cadmo («antiguo») trajo el alfabeto, que constaba del mismo número de letras, y en el mismo orden, que el alfabeto hebreo; aquel era el alfabeto griego que existía cuando tuvo lugar la Guerra de Troya. Más tarde, ya en el siglo V a.C, el poeta Simónides de Ceos elevó el número de letras a 26.
Se puede demostrar fácilmente que la escritura griega y la latina, y, por ende, los cimientos de la cultura occidental, provienen de Oriente Próximo sólo con que comparemos el orden, los nombres, los signos e, incluso, los valores numéricos del alfabeto original de Oriente Próximo con los muy posteriores griego y latino.